Cards & Guns nos transporta a un terreno inhóspito donde aguantar oleadas de criaturas sustentándose en un sistema muy adictivo de mejoras.
Hace ya 7 años desde aquella maravillosa vez que descubrí Tormentor X Punisher, un adictivo shooter cenital donde había que aguantar oleadas de enemigos con un frenetismo arrollador y una brutalidad que nunca había visto en un juego de esas características. Sin embargo, he pensado que también molaría mucho un juego que le hiciese counter, es decir, que ofreciese oleadas de similar manera, pero más centrado en la parsimonia y la estrategia que en ir tan a lo loco. Después de mucho jugar, el candidato ideal al fin está en mis manos y os lo presento en el siguiente análisis: Cards & Guns.
Cuanto la propuesta funciona, los abalorios sobran
Cards & Guns no te va a abrazar ni por su apartado visual ni sonoro, y puede que ni jugable, de primeras. Sus movimientos son toscos, la música es machacona y demasiado simple, los colores poco variados y chillones… No obstante, me está pareciendo un tremendo juegazo. «Deja las drogas», me diréis; no, no, creedme, Cards & Guns no es que tenga potencial, es en sí mismo una maravilla que una vez te engancha su loop, no vas a querer dejarlo de lado por ningún otro juego.
Cogiendo muchas ideas del boom que ha supuesto Vampire Survivors, el juego nos permite escoger un personaje y nos soltará en un mapa vacío y más llano que las calles de Pontevedra. En él, se sucederán varias oleadas de enemigos que deberemos abatir o esquivar, hasta que la cuenta atrás de la oleada llegar a su fin. Por desgracia, nuestro personaje (todos astronautas muy influenciados por Samus Aran en lo estético) empezará siendo demasiado vulnerable, pudiendo disparar una pequeña ráfaga para acabar con algún enemigo que otro. Pero aunque la gracia de Cards & Guns empieza ahí, no termina, tranquilos.
A cada ronda que sobrevivamos, podremos comprar mejoras con las gemas de experiencia requisadas a los enemigos derrotados (como si de los cristales de experiencia multicolor de Vampire Survivors se tratase) y, poco a poco, nuestro tímido astronauta acabará siendo una formidable máquina de matar que no dejará títere con cabeza en la pantalla. Claro está, llegar a ese punto requiere de perder muchas runs y empezar otras tantas, pues las mejoras pasivas tienen un peso condicional en ello.
Haz de tu personaje un auténtico gigachad espacial
La base de la jugabilidad de Cards & Guns reside en su mazo de cartas. En la partida podremos llevar hasta un máximo de tres, que nos permitirán ejecutar tres habilidades. Estas pueden ir desde armas automáticas de usabilidad infinita mientras dure el efecto, torretas o ataques en área. Conforme vayamos superando tiers de supervivencia y logros, iremos desbloqueando más. Además, las cartas se pueden mejorar con gemas violetas, las cuales podremos recolectar en todas las partidas abriendo crates o derrotando enemigos más duros.
Cuando tengamos un set de tres cartas al nivel máximo, y tengamos una cierta noción de qué características mejorar en partida y cuáles se combinan mejor, podremos hacer de nuestro pusilánime un guerrero que ni los protagonistas de Contra en sus mejores tiempos. Una vez dominado, es donde el cerebro nos hace clic y quedaremos cautivados por su propuesta tan simple pero efectista. Queremos superar la siguiente oleada para mejorar más al tipejo, queremos reiniciar la cuenta cada vez que muramos por un error estúpido y buscaremos siempre aumentar un peldaño la dificultad para poner a prueba nuestra tensión.
En ese sentido, Cards & Guns es una absoluta maravilla. Una clara maestría de que menos es más si se saben hacer las cosas bien. ¿La pega? que igual el contenido nos sabe a poco… o termina haciéndose demasiado repetitivo a lo largo de todas las variantes y límites de oleadas máximas que nos propone el juego superar. Al fin de cuentas, la base es la que ya dije, mover un personaje que dispara solo a través de enemigos que si nos tocan nos defenestran cosa mala, al más sentido del juego exitoso de Poncle.
Cards & Guns es lo que el agua a la resaca para los jugadores de Vampire Survivors
Este juego es el clásico caso de ir buscando cobre y tropezar con oro. ¿Te lo pasabas pipa con la ambientación espacial Sci-Fi de Metroid? ¿La jugabilidad de Vampire Survivors te condenó al ostracismo durante horas infinitas? ¿Te flipa hacer mazos de cartas de habilidades activas? Bueno, orgullosete, nos busques más, porque Cards & Guns es lo que necesitas para cubrir el vacío emocional que te pueden dejar esos juegos al terminarlos.
Es que de verdad, dadle la oportunidad aunque de entrada os parezca un juego feo y demasiado básico, porque una vez despega, al hacerte con su ecosistema de mejoras y superar oleadas, vais a entender la joya astronómica que nos han parido los chicos de Family Devs. Y más cuando veis lo poco que cuesta en Steam. Decir que está regalado, es quedarse corto.
Visto lo visto, le condecoro con cuatro birras sobre cinco, costándome darle la final porque creo que sí, se podía ser un poco más ambiciosos en cuanto a ofertar más variedad una vez llegamos a las oleadas más duras.
Director de Orgullogamers y el terror del SEO. Me flipan los JRPG, los Hack & Slash y los juegos con historias inusuales de esas que te dejan roto por dentro. Me encargo de que Orgullogamers no se hunda poniendo parches de cinta adhesiva.