Discounty es un juego cozy de simulación de supermercado que nos tendrá entretenidos durante unas cuantas horas.
Discounty es un juego de gestión en el que abandonamos nuestra ciudad para cumplir el sueño de nuestra tía jubilada de montar un supermercado en un pequeño pueblo. Si quedaba alguna duda cuando hablé de Final Profit de que los juegos de tiendas son lo mío, aquí queda claramente confirmado.
Lo primero que nos encontramos al iniciar la partida es la creación del personaje a nuestro gusto, más o menos, ya que aunque tengamos una amplia variedad de pelos, a nivel de ropa se queda un poco escaso. Eso sí, me ha encantado que te den la posibilidad de ser una señora mayor.
Una vez que nos hemos puesto guapos, empieza la diversión. Básicamente, tu tía te dice que te va a explotar y que una vez que te instales en la caravana en la que te deja dormir, te vayas a familiarizar con el trabajo antes del día de la apertura.
Y así, nos introducen en lo que va a consistir Discounty. Que básicamente consiste en comprar productos, descargarlos del camión al almacén y de ahí a los expositores. Una vez que la tienda esté abierta, también nos encargaremos de cobrar a los clientes. Literalmente, tendremos nuestra chuleta con los precios y nos tocará ir metiendo el importe e ir haciendo cálculos con nuestra caja. Si esto os parece aburrido, no pasa nada, más adelante hay una mejora que nos ahorra bastante trabajo. Aunque a mí, personalmente, me gustaba lo de cobrar. ¡Sí, hasta me aprendí los precios!

Pero eso no es todo. También tendremos que limpiar el local para que nuestros pobres conciudadanos no se queden pegados al suelo, ni nosotros. Hacer carteles para que venga más gente a nuestro súper perdido en medio del bosque. Y lo mejor de todo, ordenar las estanterías para favorecer aquello que nos interese vender más. Además, tendremos misiones diarias y semanales que ayudan a que esta parte no sea tan repetitiva y que nos permitirán desbloquear mejoras, como más espacio en el inventario, el escáner o más productos.
Nada más llegar al pueblo nos damos cuenta de que esto no es una tienda cualquiera, así que tampoco tenemos socios cualesquiera. Y nos va a tocar ganarnos y crear alianzas comerciales. La mayor parte del juego consiste en vender sus productos para desbloquear más. Ya os adelanto que no nos lo van a poner fácil y nos tocará sufrir un poco para cumplir sus requisitos.
En general, Discounty es bastante cozy, como ya le pasaba a Lake. Hacemos dinero casi sin querer. Aparte de lo que saquemos de las ventas, podemos reciclar las cajas y latas que nos encontramos tiradas por ahí. Y aunque hay que juntar una cantidad elevada en una de las misiones, se hace rápido. Ni siquiera podemos manipular el precio de lo que vendemos en la tienda. Al final dejé de fijarme en cuánto tenía, porque no tenía casi gastos.

Como no todo es trabajar en esta vida, aunque muchas de las misiones que nos dan van orientadas a mejorar el negocio. También tendremos que desentrañar los misterios del pueblo. Ovejas robadas, gatos que en realidad son mapaches, ratas que se han adueñado de todo. En general tenemos bastantes cositas que hacer entre la misión principal y las secundarias.
Y para que no podamos acusar de explotación a nuestra querida tía, libraremos el domingo. Lo que nos da tiempo a explorar un poco más. Os diría que también va de conocer a los NPCs, pero es que son demasiado NPCs y la mayoría de las conversaciones son iguales, todo el rato lo mismo, sin que se puedan saltar. Soy un poco asocial en los juegos, pero en este sí que me ha dado una pereza infinita hablar con nadie que no fuese por una misión.
La historia es totalmente lineal, y no podemos elegir en la mayoría de conversaciones. La vamos descubriendo con misiones o se desbloquean al interactuar con ciertos objetos que se muestran con un borde amarillo. Lo cual me ha parecido horrible, porque es totalmente saltable si no te fijas bien. Además, se me ha bugueado una línea de diálogo secundaria, ahí me he quedado, sin saber qué pasaba.

Por desgracia, me ha dado la impresión de que el juego está un poco a medias todavía. He encontrado algún que otro bug, aunque la mayoría han sido visuales. Y a nivel de mecánicas creo que podría ser mucho mejor. Por ejemplo, no podemos tener más de 5 ítems en una ranura en el inventario, lo que hace que tengamos que cambiar a otra, o si se nos olvida, como me ha pasado 200 veces, lo dejamos y tienes que volver a cogerlo. Y creo que debería tener un modo edición, porque cuando tienes que mover los objetos de la tienda es un auténtico dolor.
Tampoco entiendo muy bien por qué seguimos conservando lo del guardado exclusivo al dormir. El día que me encontré el bug perdí todo el progreso de lo que había hecho y ya he ido con miedo el resto del juego, por si acaso. Además, una vez que empieza tu turno en la tienda no puedes salir de esta. Lo peor es que tiene misiones de seguir a gente sigilosamente (pensaba que había quedado claro desde los Assassin’s Creed que a nadie le gustaban) y si fallas tienes que esperar al día siguiente para repetir. Lo peor es que no podemos irnos a dormir sin hacer el turno de la tienda, si ese día nos toca trabajar.
No os quiero desanimar. En general Discounty tiene cositas chulas, como por ejemplo, mostrarte los NPCs en el mapa con sus nombres incluidos, los locales comerciales no tienen horario, o si lo tienen es bastante extenso, por lo que siempre puedes resolver en un día lo que necesites. Y por lo que he visto de los bugs los van arreglando, de hecho, ya he conseguido continuar con mi misión secundaria.
En resumidas cuentas, Discounty es entretenido, te da para bastantes horas, han dicho que van a incluir todavía más contenido, sin especificar el qué. Una vez terminada la historia principal te permite seguir jugando si te apetece. Y visualmente es precioso. También tiene sus cositas de humor y un poco de misterio. Y lo más importante, puedes acariciar ovejas.
Si os interesa Discounty:
Lo tenéis en Steam por 19,99€ a precio estándar.

Amante de los juegos cozys, pero sobre todo indies. Obsesionada con Portal desde la primera vez que lo jugué. Y cuando no estoy jugando escribo recomendando cositas. Madre de tres gatos.

- Muchas cositas para hacer
- Horas de entretenimiento
- Le faltan cosas por pulir
- Los NPCs son aburridisimos