Análisis de Disturbed, una novela visual gratuita en Steam donde cada decisión puede llevarte a uno de sus muchos finales… casi todos mortales.
No toques eso que te mueres. O tócalo… qué más da.
Muy buenas a todos, queridos Orgullosos.
Hoy os traigo una aventura por una granja. No, no es Stardew Valley. Esta granja es más oscura y con pocas “flowers”. Disturbed, de Brad Moore.
Género: novela visual
Año: octubre de 2016
Desarrollador: iBlackpen
Editora: iBlackpen
Precio: Free to Play
Hace algún tiempo me ha dado por buscar pequeñas joyitas gratuitas en Steam. No hay muchas, es cierto, pero de vez en cuando aparece algún título disfrutable y divertido dentro de la categoría Free to Play.
El que os traigo hoy es uno de esos títulos.
Disturbed
La historia es muy básica: somos un granjero aburrido, porque hace tiempo que no hay mucho que hacer. Nada, en realidad. Las plantas se mueren, los cultivos no crecen, y al ganado le ha entrado una extraña enfermedad mortal. Vamos, lo más normal del mundo.
Nuestra misión: echarnos a dormir y dejar que pase el día, o salir a solucionar el asunto cueste lo que cueste.
Spoiler sin serlo: vamos a morir hagamos lo que hagamos.
Ahí reside la gracia de este juego, al que podrían haber llamado “1001 formas de morir”.
Vas a morir, así que busca una forma digna.
Lee y continúa.
El juego se presenta de manera “simple”, como un librojuego. Para avanzar tendremos que tomar decisiones: algunas nos llevarán más lejos en la aventura, otras nos matarán al instante, y otras no harán absolutamente nada. Asombroso, ¿verdad?
Hablando en serio: el juego se termina en menos de una hora. En un par de horitas si buscas todos los logros (muertes). Pero si vas por el “buen” camino pasarás un rato divertido leyendo una historia que resulta bastante entretenida para ser un título free-to-play.
Los escenarios son en 2D, dibujados a mano con carboncillo. Algunos personajes, como el Caballero o el unicornio, están más elaborados, pero mantienen la misma estética. En serio: os van a enamorar.
Nos encontraremos enemigos, pero tendremos la decisión de luchar o huir. La historia seguirá su curso, muramos antes o un poco después.
Es una novela visual con varios “finales” (he llegado a contar dieciséis) y solo en uno sobrevivimos. La premisa es clara: o huyes de tus problemas o te enfrentas a ellos pase lo que pase.
Los objetos no se guardan en ningún inventario. Simplemente los recogeremos y, cuando hagan falta, aparecerán en nuestras manos por arte de magia, desbloqueando nuevos caminos o diálogos. Si no tenemos el objeto necesario, el juego nos mandará hacia atrás, ya que no podremos avanzar.
Defectos: morir y tener que repetir siempre las mismas acciones —abrir la puerta del árbol, buscar la espada, el unicornio, el anillo, el oso, el perro…— puede cansar. Se puede guardar y volver a la parte buena, pero la gracia de este “survival horror” es hacerlo del tirón: si mueres, mueres. Aun así, en ocasiones la muerte da pereza, porque toca empezar de nuevo en la granja.
Tenemos la opción de “Salto rápido”, que adelanta todos los diálogos hasta la parte de decisiones, ahorrándonos muchísimo tiempo (los diálogos son interminables).
Recomiendo jugarlo con cascos: la música acompaña cada escena y ayuda a meterse de lleno en el ambiente.
Eso sí: es un juego para jugar con ánimo. Si estás de bajón, no es buena elección. Es deprimente tirando a depresivo en ciertos momentos.
Por lo demás, un juego cortito pero muy entretenido para una tarde de “¿Y ahora a qué juego?”. Y encima gratis. ¡Gratis!
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Redactora en mis ratos libres, en Orgullogamers, en Nivel Oculto y en mi blog, de mi pasión favorita: los videojuegos.
En mis ratos ocupados, soy directora y apuntadora de un grupo de teatro infantil, jefa de Comunicación de Orgullogamers y responsable de comunicación de ElectroJocs.
También hago otras cosas, pero son muy aburridas.
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