¿De veras es posible que veamos algún día The Secret of Monkey Island en Spectrum?
¿Cuántos de nosotros hubiéramos dado la mitad del brazo derecho —para engarzarnos después un suntuoso garfio en el muñón, acompañando la oferta con una buena caja de botellas del mejor Grog del Caribe, por supuesto— por haber podido disfrutar en su época de uno de los mejores videojuegos de la historia en su versión Spectrum: The Secret of Monkey Island?
Pero no fue posible, naturalmente, por las limitaciones técnicas del siempre espectacular Spectrum. Todo tiene un límite. Eso sí, aunque el tiempo ha sido cruel con la máquina de Sinclair, una legión de fans la mantiene en perfecto estado de forma. Aún se continúa programando para ella, y algunos de los juegos que en un principio parecían ciencia ficción en los 80 hoy se convierten en retos para programadores que se embarcan en la realización de estas gestas.
Todo avanza en esta vida y, por tanto, también las rutinas de programación, las nuevas herramientas y otras lindezas aparecidas —de las que este caballero no tiene la más mínima idea, pero muchísimo interés en documentarme— han permitido exprimir aún más los 48 o 128 Ks del invento. Así hemos podido ver cómo alguno de estos genios ha logrado conversiones imposibles o incluso conectar a internet el cacharro de las “gomas”, por citar algunos ejemplos.

¿Pero, aun con eso, sería posible una conversión de la obra maestra de Ron Gilbert, su Monkey Island, en nuestros vetustos ZX Spectrum teniendo en cuenta su poderosa capacidad?
La respuesta es un no… pero… ¿un rotundo no? Pues tampoco.
Patrick Furlong y Neil Parson, dos mozos británicos fundadores de Zeropolis Element, se lanzaron con el proyecto bajo el brazo: un videojuego-conversión aún en desarrollo, eso sí. Son tan fans de la saga del mono como cualquiera de nosotros, quizá más, ya que se propusieron llevar las aventuras del señor de nombre impronunciable hasta que te lo repites unas doscientas veces: Guybrush Threepwood, al ordenador de 8 bits.
Los propósitos eran claros, pero la realidad es tozuda. La capacidad de proceso y memoria del Spectrum no hace factible la conversión a niveles aceptables. De momento nos olvidamos del sistema SCUMM.
Haciendo cuentas rápidas, de haberse podido realizar en su época, estaríamos hablando de un juego de apenas 7 megas. La versión de PC constaba de 7 disquetes de ¼, lo que, más o menos y haciendo la cuenta “a la vieja usanza”, nos diría que en Spectrum habría hecho falta unas 77 cintas de casete. (Si algún informático quiere corregir mis cálculos, bienvenidos sean sus comentarios).
Edit: corrección gracias a Víctor: “Son 7 discos de 720 KB; eso, a doble cara, son 14 discos de +3 o unas 10 cintas de 60”.
Sobra decir que, a mí personalmente, no me hubiera importado hacer hueco a semejante número de cintas… total, Iron Maiden las supera con creces en número.
No quiero ni imaginar la de horas, semanas e incluso meses que hubiera estado mirando la pantalla de carga con cada nueva pantalla de juego…

El espacio es un problema, pero no el problema. En resumidas cuentas: el Spectrum no puede con Monkey Island, por mucho que recortemos en gráficos, animaciones, músicas u otros apartados.
Aun con esas, Patrick y Neil no han cesado en su empeño y han reconvertido la “aventura gráfica” en “aventura conversacional”, cumpliendo el dicho: “A falta de Grog, ¡buena es cerveza!”. Se puede decir con Orgullo (Gamer) que Spectrum tiene su conversión de The Secret of Monkey Island.
Eso sí, el juego está en fase beta y no está concluido del todo. Supongo que, trabajando los textos e intentando incluir imágenes que acompañen a los diálogos, la experiencia de juego será lo más parecida —que no fiel conversión— al original, con el especial toque que solo sabe brindar nuestro Spectrum.
Para los más curiosos, como yo, tenéis a vuestra disposición una demo del videojuego en la maravillosa e increíble web-archivo World of Spectrum.
En espera de su publicación, acabaremos con otro refrán: A Grog regalado, no le mires el etiquetado.
Por El Abuelo Cebolleta, para los bandarras de Orgullogamers.
Grog, Grog, Grog… la botella de Grog.

Doctor en Filosofía. Campeón del mundo de futbolín. Mira la magia de mi melena. Practico el deporte y la cultura. Rey Emérito de Orgullogamers.
Información Bitacoras.com…
Valora en Bitacoras.com: ¿Es posible en Spectrum? Cuantos de nosotros hubiéramos dado la mitad del brazo derecho, para engarzarnos después un suntuoso garfio en el muñón, acompañando la oferta con una buena caja de botellas del mejor Grog del Caribe…..
Bueno bueno bueno…he de confesar que yo tambien miraba con ojillos las versiones de Pc de esta maravilla de juego. Y eso que era en versión EGA aun así el colorido era lo que más llamaba la atención de los poseedores de spectrum.