Tras una entrega olvidable, BioWare nos trae Dragon Age: Inquisition, convirtiéndose en la mejor experiencia RPG de lo que llevamos de generación.
Antes de nada, quiero dejar claro que esto no es un análisis sobre el juego, solo una opinión personal.
Después de un año con las nuevas consolas de next gen (PS4 y Xbox One), y tras tanto shooter y tantas remasterizaciones, por fin ha llegado un juego de rol/RPG que realmente merece la pena.
DRAGON AGE: INQUISITION
«Lidéralos o perece»
BioWare ha sabido corregir sus errores y, después del desastroso Dragon Age 2, nos ha traído un título que sí merece la pena.
El mundo es muy amplio y explorable, dividido en diez zonas muy diferentes que sorprenden visualmente. Quiero destacar este apartado porque ha sido lo que más me ha impresionado: te llevarás más de una sorpresa y, en ocasiones, te quedarás horas simplemente contemplando el paisaje.
El juego permite montar a caballo, ya que las zonas son enormes. Sin embargo, en mi caso prefiero recorrerlas a pie, para fijarme en los detalles que ofrece este gran mundo: el movimiento de los árboles, el agua, la fauna que se desplaza por los escenarios… Todo esto hace que te sumerjas en un universo que, sinceramente, me está fascinando.

La historia aún no la he terminado, pero hay momentos en los que realmente sientes que formas parte de la Inquisición. BioWare sabe cómo hacerte sentir dentro de la trama, en gran parte gracias a la importancia de los diálogos y las decisiones que tomas. Además, hay una enorme cantidad de misiones: nada más empezar, tendrás tantas que no sabrás por dónde continuar. En mi opinión, esta abundancia es positiva, ya que otorga libertad para abordar diferentes cosas a tu manera.
En cuanto a la jugabilidad, el juego permite varios enfoques. Incluye un modo llamado “cámara táctica”, en el que el tiempo se pausa y puedes decidir los movimientos y ataques de tus personajes. Una vez seleccionadas las órdenes, reanudas la acción y puedes volver a detenerla cuando quieras. Este sistema lo utilizo sobre todo en combates contra jefes o dragones, que requieren una buena estrategia. Para los enemigos comunes, lo más cómodo es luchar en tiempo real.
Sobre el multijugador apenas puedo opinar, ya que solo he jugado una partida. (Lo estoy jugando en PS4).
En mi opinión, Dragon Age: Inquisition es el mejor juego que ha salido hasta el momento en PS4 y Xbox One.

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