Loan N Run, la recopilación mensual de videojuegos pirata para tu Spectrum. Segunda parte del artículo con el número 00 de la revista junto con todos los juegos que incluía en su cinta.
Muy buenas y bienvenidos a la segunda entrega de este macro-especial dedicado a los circuitos del Spectrum y a la revista Load n Run. En esta segunda parte os traigo el número 00 de la publicación de la revista en su versión Española. Los motivos de este cambio y baile de números en la revista y artículos, quedaron comentados en el anterior capítulo que os recomiendo leer para dar continuidad y contexto a esta y las siguientes entregas que vengan.
No me voy a extender lo más mínimo en la introducción de este segundo episodio (ni en el resto de publicaciones con los siguientes números), pues ya quedó todo dicho en el artículo de inicio. Esto pretende ser un macro-especial, repartido y cortado en varios artículos. Por lo que todos tendrán un esquema similar. Sin más rollos, vamos con el número 00 de Load n run. Espero que os guste tanto como la primera entrega. ¿Estáis preparados para recordar? pues ¡¡Vamos allá!!
Load N Run. Número 00. Enero de 1985. ¿Qué juegos traía este número?
Nombre del juego en la revista-cinta: Bombardero-Black
Nombre verdadero del juego: Harrier Attack!
Grande mi Spectrum que me ponía a los mandos de todo un Harrier. Incontables las horas que pasé con este programa en mis tardes de 48k y bocata nocilla. Volando de aquí para allá y disparando de forma random por el simple placer de descarar mi arsenal o afinando bien el tiro sobre el enemigo cuando la cosa me la tomaba algo más en serio.
Sabía perfectamente que había misiones que hacer, o al menos eso intuía, pero ni las encontraba, ni me importaba lo más mínimo. Fueron mis primeros pinitos con un «sandbox», había tarea por delante que hacer, pero me la sudaba muy fuerte. Mención especial al despegue y sobre todo a ese pedazo de salto en paracaidas del piloto cuando la cosa se pintaba chunga.
Nombre del juego en la revista-cinta: Espadachin-Duelo
Nombre verdadero del juego: SwordFight
Nunca he sido muy fan de leerme ninguna instrucción de uso. Los caminos que se abren ante la imprevisibilidad de este hecho siempre me ha traído mejores experiencias que sentarme a leer un manojo de instrucciones con teclas y movimientos de acción, que al segundo de leer ya se me han olvidado.
Mejor experimentar mediante el fallo-error. Aporreando el teclado o ir marcando tecla por tecla, desde la primera a la última, nunca se sabe donde iba a estar el resorte de acción y esperar la reacción de tu «moñeco» virtual en la pantalla. Sin leer instrucciones se dan los famosos casos del «Anda coño»
A saber: «Anda coño, si le doy a la «p» pega un rijostio con la espada virá» «Anda coño, si esta es para cubrirse» momentos así, se perderían como lágrimas en la lluvia al leer las instrucciones.
Antes de que Ryu y Ken quedaran marcados a fuego en nuestros corazones, ya había intentos por enfrentar a dos fulanos en pantalla en lucha 1vs1. Esta vez, con ambientación de época, esta vez, ¡¡toca batirse en duelo a espada, pardiez!!
Incontables eran los movimientos que podías hacer con estos dos jambos espadachines. ¡¡Esto tenía más botones de acción que el coche fantástico!!. Ya no las recuerdo, pero si lo probáis, darle a todas las teclas que podáis como si no hubiera un mañana.
Nombre del juego en la revista-cinta: Planets
Nombre verdadero del juego: AD Astra
Impresionante pantalla de presentación que nos ofrecía este Planets. Una gárgola demoníaca nos daba la bienvenida. Gárgola que nunca vi en el juego, pero tampoco importaba mucho. Una nave que recordaba bastante a un destructor imperial de La Guerra de las Galaxias, y si, no digo Star Wars para estar en armonía con el contexto de este artículo. Hasta el año 2000, con el estreno de las precuelas, Star Wars era La guerra de las galaxias en mi puto barrio.
Un eterno viaje por el espacio sideral, esquivando planetas y planetas y planetas en un bucle sin fin. Uno de los mil y un juego en los que no había límite aunque estaban muy limitados, no había viaje, no había historia, te sentabas, cargabas, te viciabas un rato y hasta luego Lucas. El final llegaba con el Game Over o porque empezaba Barrio Sésamo y había que dejar la tele libre para verlo junto a tu hermana/o o amigo/a. Yo creo que cargaba este bodrio sólo por ver el Demo-Gárgola.
Nombre del juego en la revista-cinta: Mundial de Fútbol-Mundial
Nombre verdadero del juego: WorldCup Football
Soy un yonki de los juegos de fútbol de estos hechos con cuatro palos y una bola. ¿Os acordáis de >>Match Day II<<? Pues parecido. Nunca me ha gustado el fútbol, pero los antiguos juegos de fútbol si, porque tenían que ver más con el estilo de juego que puedas hacer jugando a las chapas que con el juego de fútbol en si.
A medida que los videojuegos de fútbol se han ido pareciendo más en su estilo de juego al fútbol de verdad, me he alejado de este género en los videojuegos. Pero estas maravillas de cuatro palos mal puestos y cuatro movimientos de balón, heroína pura.
Nombre del juego en la revista-cinta: Moto War-Moto Wars
Nombre verdadero del juego: Blind Alley
¿Conocéis el famoso juego de las Motos de Tron? pues esto es lo mismo pero en vez de motos, son como abejas. Dos contra uno. Rodea con la estela que deja tu moto-abeja antes que las otras hagan lo mismo y se te acabe el chollo con la abeja reina. Para más información acerca del estilo de este juego y Tron en general, os recomiendo la lectura de mi artículo dedicado a la película y sus juegos en Spectrum: >> TRON <<
Nombre del juego en la revista-cinta: Flipper
Nombre verdadero del juego: Pinball Wizard
Uno de esos juegos «tontos» que te consumen media vida jugando con ellos. Uno de esos juegos que cargabas cuando no sabías a lo que jugar porque la oferta de tu colección pirata era tan amplia, que el mismo esfuerzo de selección te daba pereza. ¿Qué hacer? pues tirar de uno de estos juegos rápidos de partida rápida. Un pinball resultón y un tanto especial. La mesa era en horizontal y tenías 4 palotes con los que atizar la bola que lo hacía perfecto si eras pariente de Shiva y tenías cuatro manos o bien para jugar a dobles con otro humano.
Nombre del juego en la revista-cinta: La hamburguesa-Bobby
Nombre verdadero del juego: Barmy Burger´s
Que no os eche para atrás el nombre ni la ambientación de este juego porque tiene una capacidad para engancharte que acojona, tronco, acojona!! como lo último de los Judas Priest. La historia no es como para ganar un Oscar al mejor guión adaptado, pero la mecánica del juego es de una calidad soberbia y es pura esencia de videojuego arcade embotellada. Si este juego lo hubiera firmado Nintendo y fuera Mario el que pisoteara los trozos de carne, lechuga y pan para hacerlos caer y construir tu hamburguesa mientras esquivas enemigos que se empeñan en poner a régimen a todo el planeta, hoy estaríamos hablando de todo un clásico de las >>Game & Watch<< que tendrías en tu estantería para sacarla en tus vídeos de youtube. A veces la «bida» y sus personajes es curiosa.
Nombre del juego en la revista-cinta: Momia Egipcia-La mummia
Nombre verdadero del juego: Tutankhamun
Hay juegos que permanecen latentes en el recuerdo. Éste era uno de ellos. De esos juegos que casi has olvidado, que no puedes traerlos de la memoria, pero que al ver una imagen, los momentos vividos con ellos te explotan en la cara. Exclamas un ¡Hostias qué bueno, no me acordaba! y al momento surgen pasajes de tu yo infante agarrado al mando. Un videojuego simple, de esos que estimulan la imaginación, de esos que requieren de la misma para completar estructuras y personajes en la aventura, como una buena lectura. Una aventura llena de búsquedas, laberintos, llaves y puertas secretas. De esas para escaparse un rato lejos del mundanal ruido.
Nombre del juego en la revista-cinta: Basureros
Nombre verdadero del juego: Trashman
A veces toca salvar el universo, otras veces toca salvar al barrio. Y no precisamente de la típica pandilla de macarras del mafioso, con metralleta en ristre, de turno, si no de salvar al barrio para que no le coma la mierda y las miserias. La labor del técnico especialista en recogida de residuos urbanos es imprescindible y fundamental para el buen funcionamiento de la ciudad, os lo aseguro.
Una propuesta de juego cuanto menos original. Irás casa por casa recogiendo los cubos, cuidando de no pisar el césped de los vecinos y esquivando a perros falderos que quieren morderte la entrepierna. Si aún te queda un ojo libre, no lo pierdas y échaselo al «prisas» de tu compañero que lleva el camión, ¡éste no espera!. Este basurero ya lo tuvimos en el artículo dedicado a las profesiones de los héroes de los videojuegos. Os lo alcanzo, ¡que no pare el contenido! (el mejor de todos, siempre en Orgullgamer) >> Súper Héroe de los videojuegos busca empleo <<
Nombre del juego en la revista-cinta: Pennellix-Penn-X
Nombre verdadero del juego: Color Clash
Con este juego me pasa lo mismo que a Gandalf en Moria…»no tengo recuerdos de este lugar«. Creo que era parecido al arcade español ese de las brochas, pero aquí siguiendo una guía y con menos «carne» que mostrar. Lo que si recuerdo es que me debió parecer tremendo bodrio de esos de una única carga. Pasando palabra de él. Pero como aquí estamos para reunirlos todos por nuestro afán de coleccionismo, pues aquí lo tenéis. Para que lo dejéis en la estantería sin tocar, pero si poder decir que lo tienes, como pasará con tu PlayStation mini.
Fin de impresión. Hasta aquí el repaso y comentarios de los títulos que acompañaban a la revista en su estreno en España. Espero que hayáis disfrutado del viaje. Ahora os paso los enlaces con la revista y con la cinta sin olvidar la carátula que acompaño al casete. ¡Que ustedes lo archiven bien!.
Nos vemos en el número 3