Tercera entrega de Arnold Schwarzenegger y los videojuegos. Seguimos con el repaso de la filmografía de Arnold, pasada por el filtro de los videojuegos.
«Hay que joderse, como ha cambiado el arte de la forja del acero»
En mi anterior entrega de Arnold Schwarzenegger y los videojuegos por la extensión de la misma, hice una breve introducción sobre la película Terminator y me quedó pendiente repasar los videojuegos de la misma. Por lo tanto, vamos al lío. Y recordamos al distinguido, que voy a nombrar los videojuegos de Terminator…su primera parte. Terminator 1. Cuando hablemos de Terminator 2, 3 etc, vendrá el resto. Y voy a hablar de los videojuegos de Terminator 1, que recuerdo y que he podido recolectar en mi afanosa búsqueda por los vetustos archivos de mi Pc e Internet. Su usted echa en falta algún título, eternamente agradecido quedaré, si nos ilustra en los comentarios de esta misma entrada.
Videojuegos de Terminator
The Terminator
Quiero empezar este repaso, con el que para mi, es uno de los mejores videojuegos basados en la película de James Cameron. No es otro que la versión de Megadrive. Un arcade de scroll lateral, lo que los entendidos catalogarían de «shoot and run». El argumento, el mismo que la película, pero estirando las horas de metraje, en esta ocasión de juego, para recorrer los distintos escenarios parejos a la película, mientras que defendemos a Sarah Connor de polis, desalmados y claro, de nuestro querido Arnold (a modo de casi eterno final boss).
Para redondear el título, la primera fase del juego nos sitúa en el apocalíptico futuro que vive Kyle Reese, donde nos hacíamos una idea en primera persona, de como estaba la cosa de chunga y sentirlo en nuestras propias carnes, ya que, recordar, que el fragmento que se nos muestra del futuro en la primera película es algo breve y lo que nos cuenta Kyle, aunque sobrecogedor e interesante, se nos antoja más breve aún.
Luego llegó el Mega Cd, y la versión de Terminator paso por el gimnasio, como Arnold. Nos mostraron una versión del juego muy mejorada, vitaminada, remodelada y extensa que la que disfrutamos en Megadrive, amen de incluir las dichosas escenas de la película entre fase y fase y si ya el sonido y las músicas eran más que correctas en Megadrive (la pobre hacía lo que podía y recordar que este juego era de primera hornada) en el Mega Cd, eran perfectas. Y encima el juego, nos estaba mal en ambas versiones. Si podéis, probadlo y disfrutar de este Terminator (Y si no, esperad hasta que lo pueda subir por estas páginas)
Os dejo con dos gameplays. Uno con la versión de Megadrive y el otro…¿adivinad?.
«Megadrive»
«MegaCd»
Naturalmente, luego tenemos versiones que en esencia, es este mismo título de Megadrive-Megacd, pero algo más descafeinado. Por ejemplo la versión que nos dejó Super Nes. Cambiamos un poco el aspecto del protagonista, un poco la distribución de los escenarios, a ese puncarro lo ponemos más chungo, apagamos un poco las luces, le damos más color al asunto y poco más, a si, y un poco de Modo 7 en las fases intermedias, que a la muchachada le gusta eso de las ampliaciones de los Sprites. En esta ocasión, ni el Modo 7 salva a esta lamentable versión, como diría el Joker: «Si vas a jugar, juega al de Mega», y «Si vas a morir, muere sonriendo»
«A veces, nos comprábamos los cartuchos de Super Nes si olía a Modo 7, pero este título, debería haber acompañado al de ET de Atari en el desierto»
Otro ejemplo, tomando como esencia el juego de Mega y por bandera, aunque en este caso, la bandera ondea a media asta, es la inefable a la par que horrorosa versión de la hermana pequeña de Super Nes, nuestra querida y amada Nes. Para muestra os voy a poner el video de AVGN, donde le da un buen repaso y cuenta de lo que os digo. Muy recomendado su visionado:
«The Terminator. Versión Nes y Versión AVGN»
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The Terminator Bethesda Softworks 1990
Sin tener en cuenta el año de publicación y menos aún el título, si os dijera que se trata de un videojuego de mundo abierto, donde los transeúntes inocentes están a merced de nuestras fechorías, que puedes entrar en tiendas, bancos y armerías y puedes coger cualquier coche que se te antoje para recorrer la ciudad y hacer lo que te salga del higo, amen de luego hacer las misiones que tienes encomendadas…si te preguntara que juego es, posiblemente me dirías que GTA o cualquiera que se le pareciese ¿verdad?, bueno, pues no.
Realmente es el Terminator que nos tenía preparado Bethesda en 1990. Posiblemente cuando veáis el vídeo que os voy a poner, deseareis que os arranque los ojos, pero si lo vierais con los míos, sólo veríais «hamor»
A pesar del «hamor» que destila por los cuatro costados este videojuego, me da la impresión, de que originariamente, este Terminator no lo era de origen. Me da la impresión de que esto, era una prueba de un motor gráfico. Una versión alfa o como quieras llamarlo del motor que luego se emplearía en la saga más famosa de Bethesda: The Elder Scrolls.
Supongo que esta «prueba de motor, fue mostrada a los gerifaltes de la compañia y no cabe duda de que les pareció excelente, tanto, que proporcionaron un juego, un globo sonda que sacar al mercado. Los currelas, se pusieron manos a la obra y gestaron esta maravilla.
Pero algo chirriaba. Sacar este juego, así, sin más, podría resultar irritante para los «Flanders» del lugar, por su violencia gratuita. PERO, si conseguimos la licencia de una película, que se adapte a esto, (y lógicamente, modificarlo aún más, para que se adaptara del todo) las pestes echadas por los «Flanders» se disiparían al usar como defensa, que el juego, está basado en un película y es fiel a ella. Las furias de los «Flanders», se canalizarían a otra parte que no fuera el juego. Dicho y hecho. A meter en una caja y al corte ingles con ellos. Esto último, es una suposición mía, es totalmente el montaje de mi propia película particular.
Y que yo sepa, hasta aquí llega la escasa lista de videojuegos basados en Terminator 1. A pesar de ser una película que tuvo tirón, no es comparable con el tirón y el éxito masivo que tuvo su secuela: Terminator 2. En esta si hubo un chorro de videojuegos, y muchas compañías querían parte de la tarta de billetes que proporcionaban las aventuras y desventuras de la familia Connor, tan solo con poner en la carátula del juego al bueno de «Chuache», pero como dirían en Conan, «eso es otra historia» que por supuesto os contaré
Extras del DVD de la entrada
En este apartado de «extras» es donde aprovecho para contaros algunas cosillas particulares y que rozan lo interesante del asunto. Voy a dar entrada, con la siempre sugerente coletilla de «Sabias que…» por lo tanto:
¿Sabías que Arnold, en un principio no iba a interpretar al T-800 en Terminator y que a James Cameron le caía Arnold como una patada en los cojones?
Efectivamente. A James Cameron no le gustaba Arnold. Dudaba de su capacidad interpretativa, sólo eran 100 kilos de puro músculo y cabeza hueca. En una tarde de invierno, Cameron dijo despectivamente a su mujer: «Cariño, no me prepares nada para cenar que tengo que ir a cenar con Conan»
Por imposición de la productora de Terminator, Arnold debía estar en la película. Sus resultados en taquilla con «Conan el bárbaro», eran más que rentables y respetables, sobre todo para un productor y a la gente, al público, parecía gustarle el Austríaco de marras. De modo, que esa mole de apellido impronunciable, debía estar en la cinta. Y no sólo eso, Arnold tenía que ser el protagonista indiscutible, estaba nombrado para ser Kyle Reese.
A Cameron se le llevaron los demonios. Pero esa presunta cena que iba a tener con Conan y que presuntamente iba a resultar infructuosa, no lo fue tanto, para sorpresa del propio James, que desde ese día, bueno, desde esa noche estrellada y llena de «hamor», cambio su parecer respecto a la musculoca de Arnold y dio comienzo, el principio de una hermosa amistad.
El primer cambio que sugirió Arnold, para deleite de los oídos de Cameron, era que no le parecía creíble, que él, con ese cuerpo serrano, interpretara a Kyle Reese, ya que éste provenía de un tiempo, en el que las cosas no estaban muy bien que digamos. No era creíble que en una guerra apocalíptica, el héroe fuera un «mazao» que en nada se le notara que había pasado penurias y hambre. No. esto no podía ser así. A Arnold, lo que le iba como anillo al dedo era interpretar al villano, al malvado, al Terminator. Y funcionó naturalmente, que os voy a contar, y aquí mi aplauso por Arnold por esa difícil decisión de interpretar al villano, tan al comienzo de su carrera.
Fue una jugada maestra pero no carente de riesgo. Una jugada arriesgada que podría encasillar a Arnold como malo malisimo de turno, pero una jugada que salio francamente bien. Terminator nos proporcionó uno de los mejores villanos del cine y el Chuache en nada fue encasillado, por una vez, el público entendía que «un malo, luego pudiera hacer de bueno». Esto que parece sencillo, creedme que no lo es tanto en la mente colectiva del borreguismo general.
Si Arnold iba a ser finalmente Terminator, había que hacer algunos cambios en el reparto. Para empezar, tenían que llenar el hueco dejado por el Chuache para Kyle Reese, en esto no había problemas, Cameron tiró de agenda «amiguil» y llamó al señor Michael Biehn, que visto ahora, con la experiencia que otorga la perspectiva histórica, no hay un Kyle más perfecto.
«Siempre que trabajo con James Cameron, me muerden la mano…es mi sino»
Y que pasaba con el actor, que en principio iba a interpretar a Terminator. Aquí Cameron lo tuvo más complicado., ya que incluso se hicieron bocetos y pruebas de vestuario y audiciones con el primer candidato a la «alcaldia de Terminator». El actor que en un principio iba a ser una criaturita de Skynet, no era otro que el señor: Lance Henriksen. Aquí os dejo el boceto primigenio:
Lance Henriksen, no tuvo más remedio que aceptar, lo que los jefes dictaban. Pero aún con esas, demostró ser todo un caballero y un profesional al aceptar continuar con el proyecto Terminator, interpretando al ayudante del comisario de policía.
«-Qué!…Qué Dicen?….
-Que estás fuera
-Mierda»
Pero hay final feliz para Lance Henriksen, en su sueño de interpretar a un robot o androide o como quieran llamarlo. Años más tarde, en 1986 y de nuevo de la mano de James Camenron y movido tal vez por una deuda de honor, Lance Henriksen pudo quitarse la espinita del androide, ya que Cameron, le reservó el papel de Bishop en la película Aliens el regreso. Eso si, en vez de interpretar a una máquina implacable, con fijación por el exterminio, le toco interpretar al carismático, valiente, aguerrido, eficiente, decidido, genial; en una palabra, héroe: Bishop.
¿Sabías que Arnold-Terminator sale en The Revenge of Shinobi?
Como esto es el repaso de los juegos de Terrminator, creo apropiada esta curiosidad ya que no se trata de un videojuego especifico de Terminator, pero si que aparece el protagonista de la entrada de hoy, con forma de final boss, en el genial y fabuloso The Revenge of Shinobi.
Y hasta aquí la entrada de hoy. Una vez más, me he extendido más de lo que hubiera querido. Y yo que tenía pensado finiquitarme esta serie de «Arnold Schwarzenegger y los videojuegos» en apenas tres partes, pues ha resultado que no. No se cuantas partes me llevará, pero el viaje, valdrá la pena, por lo menos para mi.
Sólo me queda invitaros a la siguiente entrega de Arnold Schwarzenegger y los videojuegos. Para esa ocasión, visitaremos la Jungla, y si no me extiendo demasiado, hablaremos de la relación entre Arnold y Stephen King.
Otra cosa, si os ha gustado la entrada, compartirla! ayuda más de lo que os pensáis 😉
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