Recuerdo como si fuera hoy lo orgulloso que me sentí tras
haber jugado cuatro horas seguidas por primera vez, fue con Crash Team Racing,
pasándome la aventura casi del tirón. No hice el 100% del juego, ni mucho
menos, no hice nada que no hubiera hecho antes, ni que a día de hoy haga mucho
más rápido. Lo importante es que había pasado cuatro horas de mi vida jugando
del tirón. Era un hito de resistencia y de aguante, y obviamente yo era un
crío.
haber jugado cuatro horas seguidas por primera vez, fue con Crash Team Racing,
pasándome la aventura casi del tirón. No hice el 100% del juego, ni mucho
menos, no hice nada que no hubiera hecho antes, ni que a día de hoy haga mucho
más rápido. Lo importante es que había pasado cuatro horas de mi vida jugando
del tirón. Era un hito de resistencia y de aguante, y obviamente yo era un
crío.
Con los años, y una era de ps2 que me pilló con la
adolescencia y las hormonas rebotadas, podía pasarme horas y horas jugando. No
voy a ocultar que Gran turismo 4 me tuvo algún sábado de 7 de la mañana a 1 del
mediodía jugando y parando para desayunar y poco más, tampoco ocultaré que pasé
una noche entera con un primo mío subiendo los 15 puestos de la blacklist en
Need for Speed: Most Wanted, y mucho menos voy a ocultar el conseguir todos y
cada uno de los personajes de Tekken 3 y 5 en dos tardes no consecutivas; o sí,
eso no lo recuerdo.
adolescencia y las hormonas rebotadas, podía pasarme horas y horas jugando. No
voy a ocultar que Gran turismo 4 me tuvo algún sábado de 7 de la mañana a 1 del
mediodía jugando y parando para desayunar y poco más, tampoco ocultaré que pasé
una noche entera con un primo mío subiendo los 15 puestos de la blacklist en
Need for Speed: Most Wanted, y mucho menos voy a ocultar el conseguir todos y
cada uno de los personajes de Tekken 3 y 5 en dos tardes no consecutivas; o sí,
eso no lo recuerdo.
Y ya el año pasado, en Dark Souls, había pasado 48 horas de
juego en dos semanas. Había perdido dos días tranquilamente fuera del mundo
terrenal, matando huecos y alzándome hasta la primera campana, descendiendo
hasta la segunda, llegando al lugar de descanso de los dioses y habiendo
soltado alguna lagrimita por Sif. O ayer que casi falto a terminar
este artículo por mi problema con Dirt Rally (5 horitas en una tarde, y manteniendo mi vida social).
juego en dos semanas. Había perdido dos días tranquilamente fuera del mundo
terrenal, matando huecos y alzándome hasta la primera campana, descendiendo
hasta la segunda, llegando al lugar de descanso de los dioses y habiendo
soltado alguna lagrimita por Sif. O ayer que casi falto a terminar
este artículo por mi problema con Dirt Rally (5 horitas en una tarde, y manteniendo mi vida social).
Y a día de hoy, esto a lo mejor no es motivo de orgullo, y
puedo llegar a decir que hasta cierto punto me siento mal por pasarme demasiado
tiempo jugando cuando tengo otras cosas que hacer. Y no se queda esto ahí, es
posible que quiera cumplir ciertos horarios y eso no me deje más que espacios de una hora para ponerme. Y tampoco tiene por qué ser malo, para sernos
sinceros, eso me ha abierto un mundo de cositas que probar y también una
filosofía distinta a la hora de jugar. Así me encontré con el juego en móvil de
Kung Fury, al cual dediqué un artículo, así empecé a jugar a la psp durante la
publicidad cuando veía algo en televisión y así empecé a dedicarle sesiones de
media hora a Hearthstone porque era lo que me daba tiempo antes de ir a clase.
puedo llegar a decir que hasta cierto punto me siento mal por pasarme demasiado
tiempo jugando cuando tengo otras cosas que hacer. Y no se queda esto ahí, es
posible que quiera cumplir ciertos horarios y eso no me deje más que espacios de una hora para ponerme. Y tampoco tiene por qué ser malo, para sernos
sinceros, eso me ha abierto un mundo de cositas que probar y también una
filosofía distinta a la hora de jugar. Así me encontré con el juego en móvil de
Kung Fury, al cual dediqué un artículo, así empecé a jugar a la psp durante la
publicidad cuando veía algo en televisión y así empecé a dedicarle sesiones de
media hora a Hearthstone porque era lo que me daba tiempo antes de ir a clase.
Por tanto, la duración de un videojuego y la duración de una
sesión es algo importante y se relacionan entre sí. Para ponerlo sobre la mesa,
a Fallout 3 puedes jugar 30 minutos sin necesidad de tener que seguir, pero su
gran duración hace que te vaya a costar mucho tiempo si quieres acabarlo así. O
si te pones a jugar a Leage of Legends, tienes que terminar una partida por lo
menos y estás obligado a estar entre media hora y una hora, pero para terminar
con él sólo tienes que decidirte a dejar de jugarlo, al no tener un objetivo
más allá de tu partida.
sesión es algo importante y se relacionan entre sí. Para ponerlo sobre la mesa,
a Fallout 3 puedes jugar 30 minutos sin necesidad de tener que seguir, pero su
gran duración hace que te vaya a costar mucho tiempo si quieres acabarlo así. O
si te pones a jugar a Leage of Legends, tienes que terminar una partida por lo
menos y estás obligado a estar entre media hora y una hora, pero para terminar
con él sólo tienes que decidirte a dejar de jugarlo, al no tener un objetivo
más allá de tu partida.
Tampoco digo que todos los juegos tengan que durar como Dr.
Langeskov, The Tiger, and The Terribly Cursed Emerald: A Whirlwind Heist
(decidlo sin respirar, si hay agallas), juego que he acabado dos veces y llevo
39 minutos de juego, según steam. Sin
embargo, este es uno de mis juegos del año. En este punto estoy llegando al momento
en el que parece que quiera defender eso de que “cada juego tiene que durar lo
que tiene que durar” o que “la duración no es algo importante”, pero no quiero
llegar ahí, que también.
Langeskov, The Tiger, and The Terribly Cursed Emerald: A Whirlwind Heist
(decidlo sin respirar, si hay agallas), juego que he acabado dos veces y llevo
39 minutos de juego, según steam. Sin
embargo, este es uno de mis juegos del año. En este punto estoy llegando al momento
en el que parece que quiera defender eso de que “cada juego tiene que durar lo
que tiene que durar” o que “la duración no es algo importante”, pero no quiero
llegar ahí, que también.
El caso es que la persona que está jugando no sienta que
pierde el tiempo, por mucho que el ritmo del juego tenga que bajar un poco por
bien del mismo y de su narrativa. Si el jugador siente que está perdiendo el
tiempo es cuando va a parar, por muchas horas libres que tenga. Cuando jugué
Bioshock Infinite (por mucho que me guste) me sentí perdiendo el tiempo, y
tenía ganas de dejarlo en las «infinitas» escenas de acción que el juego te
forzaba a tener porque sí, y yo tenía todo el tiempo del mundo para jugar.
pierde el tiempo, por mucho que el ritmo del juego tenga que bajar un poco por
bien del mismo y de su narrativa. Si el jugador siente que está perdiendo el
tiempo es cuando va a parar, por muchas horas libres que tenga. Cuando jugué
Bioshock Infinite (por mucho que me guste) me sentí perdiendo el tiempo, y
tenía ganas de dejarlo en las «infinitas» escenas de acción que el juego te
forzaba a tener porque sí, y yo tenía todo el tiempo del mundo para jugar.
Por eso algunos juegos pueden tenernos horas y horas jugando,
sin saber por qué puñetas perdemos nuestra vida y nos dejamos llevar por la
filosofía de “una misión más y paro”, porque nos sentimos útiles, sentimos que
avanzamos en nuestro camino y una de las
primeras razones para mantenernos en juego es tener un objetivo y sentir que
avanzamos en la realización del mismo.
sin saber por qué puñetas perdemos nuestra vida y nos dejamos llevar por la
filosofía de “una misión más y paro”, porque nos sentimos útiles, sentimos que
avanzamos en nuestro camino y una de las
primeras razones para mantenernos en juego es tener un objetivo y sentir que
avanzamos en la realización del mismo.
Podría ponerme filosófico y hablar de las similitudes con la
vida, pero más de dos páginas de un tostón como este no las aguanta nadie. Por
lo mismo, dirijo este pensamiento por cómo recae sobre cualquier jugador o
cualquier persona que hable sobre videojuegos con cierto interés. Vamos a
sernos sinceros, para el jugador medio, cuanto más se ajusten estos tiempos a
los horarios de juego que tengan, mucho mejor será. Por eso mucha gente hace
palmas con las orejas cuando nos prometen más de 100 horas de historia y otros
resoplan y dicen, «ojalá tuviera tiempo». Sin embargo, a la hora de valorar una
obra tenemos que tener en cuenta un aspecto más.
vida, pero más de dos páginas de un tostón como este no las aguanta nadie. Por
lo mismo, dirijo este pensamiento por cómo recae sobre cualquier jugador o
cualquier persona que hable sobre videojuegos con cierto interés. Vamos a
sernos sinceros, para el jugador medio, cuanto más se ajusten estos tiempos a
los horarios de juego que tengan, mucho mejor será. Por eso mucha gente hace
palmas con las orejas cuando nos prometen más de 100 horas de historia y otros
resoplan y dicen, «ojalá tuviera tiempo». Sin embargo, a la hora de valorar una
obra tenemos que tener en cuenta un aspecto más.
El relleno, esas horas muertas que hacen que un juego sea
mucho más largo, pero se hacen por pura inercia, porque si no lo hacemos
nosotros, ¿Quién va a matar a las ratas que infestan el establo del campesino
de turno? No hablo solamente de misiones secundarias o recolección de objetos
inútiles, hablo de momentos en los que la historia se para, da un rodeo, y el
juego empieza a resultar tedioso. Por querer alargar el juego se pierde nuestro
objetivo de la cabeza y en ese momento, se pierde nuestra atención.
mucho más largo, pero se hacen por pura inercia, porque si no lo hacemos
nosotros, ¿Quién va a matar a las ratas que infestan el establo del campesino
de turno? No hablo solamente de misiones secundarias o recolección de objetos
inútiles, hablo de momentos en los que la historia se para, da un rodeo, y el
juego empieza a resultar tedioso. Por querer alargar el juego se pierde nuestro
objetivo de la cabeza y en ese momento, se pierde nuestra atención.
Se abre la boca, ya es bastante tarde, a dormir…
Hago videojuegos en mi tiempo libre, y a veces hasta juego. 4 Proyectos inacabados y contando.
JAZZVIER
Redacción Orgullogamers
Muy buena reflexión y en estoy totalmente de acuerdo contigo.
Ahora mismo estoy en una fase de mi vida en la que tengo que atender otras cosas y dosificar mi tiempo libre en aquellas cosas que me gusta hacer y no sólo que videojuegos.
Por eso mismo cuando quiero jugar, busco juegos directos en los que no me tengan que entretener esas largas horas para hacer 2 cosas (véase un RPG o similar). Y eso que ahora mismo juego a Xenoblade de WiiU (valga la redundancia) que no es un juego para nada directo, pero me pasa eso que dices, que no veo que pierdo el tiempo y aunque vaya a mi marcha (llevo unas 110 horas en 3 meses casi 4), me da esa sensación de que avanzo y no quiera dejarlo y ponerme a otra cosa.
Buen artículo ^^