El conflicto legendario: La batalla de los bastardos

La lucha del bien contra el mal. La disputa épica, intrínseca en todas las producciones cinematográficas y televisivas de los últimos años. Y justo hoy que se estrena el penúltimo capítulo de la sexta temporada de Juego de Tronos titulado «La batalla de los bastardos», será la exacta representación de una pelea sobre todo lo que amamos y odiamos de la serie, algo que no tiene precedente en un show tan gris como lo es el creado por David Benioff y Daniel Bret Weiss.

Los salvajes, liderados por Tormund Giantsbane, son la fuerza medular del
ejercito de Sansa Stark.

En la esquina del hombre desollado tenemos a Ramsay, Snow en primeras pero hecho Bolton por decreto real, se caracteriza como un ser pérfido, parricida, sanguinario, cruel, despiadado y demente. Pero, contrario a la concepción que tenemos de que un villano se convierte en vil porque no tenía de «otra», el ex-bastardo disfruta la maldad. Se regocija en ella. Cada persona que mató, cada vez que violó a Sansa, cada hombre que desolló, se convirtieron en duros martillazos en mármol que finalizaron esculpiendo al actual Guardián del Norte en uno de los personajes más poderosos de Westeros.

El bastardo del Fuerte de Terror, por más vil y perverso que sea, es innegable su
natural astucia en los combates.
La ingenuidad fue lo que mató a Jon Snow, pero la daga que se clavó en todos
nuestros corazones fue la de Olly, el protegido del Lord Comandante.

Y en la otra esquina del lobo huargo se encuentra Jon Snow, que pudo ser Stark pero no quiso por respetar el juramento de la Guardia de la Noche, es la antítesis de Ramsay Bolton. Es un hombre piadoso, romántico, valiente, recto, honorable, honesto y virtuoso. Una clásica «cenicienta» también, ya que es el hijo no deseado, que nunca tuvo las oportunidades de sus hermanos, que defiende a los débiles por encima de sus sufrimiento personal, que a base de honestidad y coraje llegó a ser el Lord Comandante de la Night’s Watch. No obstante, por todas esas cualidades que lo hacen «bueno», fue asesinado por sus propios suboficiales y el muchacho que había tomado como protegido, Olly.

A comparación de su mejor amigo Samwell Tarly, Jon sí aniquiló a un caminante blanco
en duelo singular. Tan magnífica fue la hazaña que lo notó el Rey de la Noche.

Pero la primicia principal, es que en los Siete Reinos (y en todo país capitalista) ser benévolo es tóxico. Cuando en ocasiones parecería ser que Jon es castigado por ser honorable, a Ramsay se le premia su perversidad. Se necesitó de un acto sobrenatural para que Jon regresara a la vida, el verdadero «héroe» renacido que terminó haciendo lo que el Lord Comandante Mormont le advirtió no realizara «¿Eres un hermano de la Guardia de la Noche o un niñato bastardo que quiere jugar a la guerra?»…

Sansa Stark, la que más sufrió la demencia de Ramsay Bolton sabe que será
una batalla muy difícil de ganar. «You don’t know him»

Ya veremos si las fuerzas del bien, comandadas por un bastardo, el hijo de un cangrejero y un salvaje prevalecerán en contra del poder militar de los Umber, Karstark y Bolton lideradas por el hombre que inició como un torturador de Greyjoys y acabó como el Guardián del más grande de los Siete Reinos. Pero si hay algo que George Raymond Richard Martin tiene como marca registrada, es que los malos consiguen lo que quieren. A cualquier costo.

Les dejo el preview del capítulo para que sustenten todavía más sus ansías de lo que será la batalla que marcará generaciones:

¿Quién ganará?

0 0 Votos
Article Rating
Subscribe
Notify of
0 Comments
Inline Feedbacks
View all comments
0
¡Dinos lo que piensas, comenta!x